Help

jakob-lorber.cc

Capítulo 2 Cartas de Jesús

Segunda carta de Abgaro a Jesús

1. Abgaro, miserable soberano de Edessa, a Jesús, el buen Salvador que ha aparecido en la región de Jerusalén, ¡Salud y honor divino!.

2. ¡Oh Jesús, buen Salvador! Mi hijo primogénito, heredero del trono, quien esperaba conmigo, con gran paciencia y gozo, Tu llegada a mi ciudad, ha enfermado mortalmente. Una fiebre maligna se ha apoderado de él, poniéndolo en peligro de morir en cualquier instante. Pero yo sé, como el mensajero me ha asegurado, que Tú curas estas enfermedades sin medicinas, solamente con Tu palabra y Voluntad, incluso a distancia.

3. ¡Oh Jesús, buen Salvador! ¡No me conformes esta vez a mí, que también estoy enfermo, con el tiempo de Tu Ascensión al Cielo que me has anunciado, sino, ayuda, ayuda, ayuda ahora mismo a mi hijo!.

4. Escrita en mi ciudad de Edessa, enviada por el mismo fiel mensajero.

Respuesta de Jesús

5. »Abgaro, grande es tu fe. Por ella bien podría mejorar tu hijo. Mas como Yo he encontrado en ti más amor que en Jerusalén, por eso quiero hacer mucho más por ti que si sólo hubieras creído.

6. Yo, el Señor de toda la Eternidad, ahora un maestro de los hombres y un libertador de la eterna muerte, daré a tu hijo la vida eterna antes de Mi Ascensión, porque sin verme ni conocerme, antes de saber sobre Mi pasión que sufriré por todos los hombres, me ha amado con todo su corazón. Así, Mi querido Abgaro, perderás a tu hijo en el mundo según la carne, pero lo ganarás mil veces más según el espíritu en Mi Reino Eterno.

7. Mas no creas que tu hijo, cuando muera, morirá de verdad. ¡No, no! Cuando muera despertará del sueño mortal de este mundo a la Verdadera Vida Eterna en Mi Reino, la cual es espiritual y no corporal.

8. Por eso no te aflijas en tu alma. Ve, oye y —cállalo: ¡Sólo Yo soy el Señor, y fuera de Mí no existe ningún otro! Por eso Yo hago libremente lo que hago. Nadie puede decirme: haz esto o no lo hagas.

Capítulo 2 Vista móvil Aviso legal